El cerdo ibérico es una raza de cerdo propia de la península de la que recibe su nombre y por lo tanto, solo podemos encontrarla en España y Portugal.
Es un animal con unas características especiales que hace que esta raza sea diferente al resto de la especie porcina.
Estos animales se crían en las dehesas ibéricas de toda la península y están adaptados al ecosistema. Los cerdos realizan ejercicio físico y se mueven ampliamente por las dehesas arboladas. Los productos derivados de este tipo de cerdos se caracterizan por la grasa que tienen infiltrada y hace que su carne sea más jugosa y con grandes valores nutricionales.

Otra característica importante de los cerdos ibéricos es su anatomía. Estos animales, por su forma de vida y alimentación tienen el esqueleto muy fino, estilizado con el hocico recto y largo, pero sus patas son fuertes y muy resistentes. Su tamaño es medio con piel oscura y sin ser muy peludo. Sus pezuñas suelen ser negras, de ahí que se conoce como “pata negra” pero existen muchos cerdos ibéricos que no tienen ni la pezuña negra ni su piel es oscura.

COMPORTAMIENTO

Los cerdos son animales muy curiosos que pasan gran parte del tiempo de su actividad explorando el ambiente que les rodea.Investigan oliendo y hozando. Es frecuente ver a uno o varios cerdos haciendo lo mismo al mismo tiempo y estimulándose mutuamente. El cerdo es un animal que en condiciones naturales vive en grupo. Dentro de un grupo de cerdos existe una estructura social muy característica, ya que se establece un escalonamiento de mayor a menor importancia entre todos los individuos.Permanecen largos períodos inactivos. Pueden permanecer echados hasta 19 horas diarias, de las cuales pasan aproximadamente la mitad durmiendo.

ALIMENTACIÓN

El cerdo de bellota 100% ibérico es aquel que ha desarrollado toda su vida en la dehesa.
Recibe una alimentación a base de hierbas, flores y otros productos naturales y en la época de montanera, período de engorde que dura unos dos, tres o incluso cuatro meses y que tiene lugar entre los meses de noviembre y marzo, el cerdo se alimenta de bellotas y pastos, alcanzando el peso óptimo de sacrificio.

REPRODUCCIÓN

La reproducción del cerdo ibérico se lleva a cabo en el mes de marzo, normalmente para que el parto sea en julio. Hay una curiosidad en cuanto a la gestación y es que tiene una duración de tres meses, tres semanas y tres días.
La madre sí debe ser siempre ibérica pura, pero el padre no siempre lo es; puede ser de raza Duroc y de sus cruces con la ibérica pura.
El lechón puede pesar al nacer entre 700 y 1000 gramos y cada camada suele ser de 8 crías, de las cuales es normal que se seleccionen 6 de ellas.
A los 90 días alcanza ya los 23 kilos de peso. De esos tres meses, 30 días están en lactación y el resto con pienso. En el último de esos tres meses empieza su adaptación al medio.