En verde zona de anidada de la Cigüeña blanca (Ciconia ciconia) En azul zona de invernada Las flechas rojas son las rutas migratorias

La cigüeña blanca (Ciconia ciconia) es una especie de ave Ciconiiforme de gran tamaño, perteneciente a la familia Ciconiidae.

Existen 2 subespecies, que se diferencian por su tamaño, con distribución diferente entre ambas. La subespecie nominal, C. c. ciconia, tiene una amplia distribución, si bien disjunta, en Europa, el Norte de África y en algunas partes del occidente de Asia. En Europa existen concentraciones en la Península Ibérica y gran parte del centro y este de Europa, con un 25% de la población mundial concentrada en Polonia.​

La población de la subespecie asiatica contaba alrededor de mil cuatrocientos cincuenta aves individuales y se distribuye en una región en Asia central entre el mar de Aral y Xinjiang en el oeste de China. Se cree que la población de Xinjiang se extinguió alrededor del año 1980.

Nosotros trataremos sobre la subespecie europea, que es la que nos atañe en nuestra Comarca de Tentudía.

CARACTERÍSTICAS

Cigüeña blanca (Ciconia ciconia) exhibiendo su plumaje.

La cigüeña blanca (Ciconia ciconia) es una especie de gran tamaño y notable envergadura. Luce un característico plumaje blanco, aunque con las alas de vuelo de color negro. El pico —que es largo y apuntado— presenta una tonalidad rojiza o anaranjada muy intensa en el caso de los adultos, rojo sucio en los ejemplares juveniles y prácticamente negro en los pollos. Las patas son de un intenso color rojo anaranjado en las aves adultas y rosadas en los jóvenes. Sus medidas en promedio son de 100 a 115 cm desde la punta del pico hasta el final de la cola.

En vuelo adopta una postura característica, con el cuello y las patas estiradas.

Pareja de Cigüeñas (Ciconia ciconia) crotoreando.

Suele ser un ave bastante silenciosa, aunque emite algunos sonidos de alarma cuando se excita o en presencia de individuos extraños en las inmediaciones del nido. El sonido más característico de la especie es un sonoro castañeteo producido al entrechocar las mandíbulas, conocido como “crotoreo”, que el ave ejecuta como salutación hacia su pareja.

Las cigüeñas son aves migratorias. Es decir, pasan los meses de verano en lugares cálidos y en invierno, cuando llega el frío, vuelan grandes distancias a zonas donde la temperatura es más agradable.

Es un ave gregaria y se registraron bandadas compuestas de miles de aves en las rutas de migración. Las aves que no se reproducen, se reúnen en grupos de 40 o 50 durante la temporada de cría. Parejas de cigüeñas blancas pueden reunirse en pequeñas bandadas para cazar.

HÁBITAT

Viven en zonas pantanosas, prados húmedos y aguas superficiales en terrenos abiertos.

Es un ave migradora que vuela hacia sus cuarteles de invierno en África Oriental por 2 rutas bien delimitadas (sobre el estrecho de Gibraltar y sobre el Bósforo).

Las zonas de alimentación preferidas de la Cigüeña blanca se componen de pastos verdes, tierras de cultivo, y humedales poco profundos. Evita las áreas cubiertas de hierba alta y arbustos. Como ejemplo, en la región de Chernóbil, en el norte de Ucrania, las poblaciones de Cigüeña blanca disminuyeron después del accidente nuclear de 1986, cuando las tierras cultivadas fueron abandonadas y se transformaron en baldíos con arbustos e hierbas altas. En algunas regiones de Polonia, las malas condiciones en las zonas de alimentación naturales obligaron a las aves a buscar alimentos en vertederos desde 1999.

AnidaN en mayor número en zonas con pastizales abiertos, zonas verdes húmedas o periódicamente inundadas, y menos en zonas con una cobertura vegetal alta, como los bosques y matorrales. En las zonas de invernada en África, habita en pastizales, humedales y tierras de cultivo.

ALIMENTACIÓN

Cigüeña blanca (Ciconia ciconia) alimentándose.

La alimentación de la cigüeña es ligeramente variada. Según los estudios de algunos expertos en esta materia, esta ave se alimenta de pequeños mamíferos, gusanos y algunos insectos. En menor cantidad también se le ha conocido alimentándose de algunas ranas, crustáceos, lagartijas, culebras y diversos peces.

Sin embargo, a pesar de que como hemos visto la dieta es más amplia, lo cierto es que la comida de la Cigüeña blanca se determina en las estaciones en que están en los cuarteles de invierno y cuando se marchan porque ha llegado la época de verano y salen a migrar. En el primer caso, su alimentación la constituyen principalmente saltamontes mientras que en la segunda instancia, estaríamos hablando de lombrices de tierra casi en un 90% de todo lo que completa su alimentación.

ESTADO DE CONSERVACIÓN

Cigüeña blanca (Ciconia ciconia)

En 1988 la UICN la clasificó como una especie casi amenazada y desde el pasado 1994 como una especie bajo preocupación menor. Todo esto ha hecho que, con el paso de los años, observando la gran importancia que tiene este animal en nuestro hábitat, el ser humano se haya interesado por protegerla de alguna manera y poner algunos ejemplares bajo cautiverio con la idea de que no podamos quedarnos sin reservas de Cigüeñas blancas.

La Cigüeña blanca se encuentra entre las especies que conforman el “Acuerdo sobre la Conservación de Aves Acuáticas Migratorias de África y Eurasia” (AEWA)

Se benefició durante la Edad Media con ciertas actividades humanas, como el corte y despeje de áreas forestales, pero los cambios en los métodos agrícolas y la industrialización hicieron declinar su población e incluso causaron su desaparición de algunas regiones de Europa durante los siglos xix y xx.

En la actualidad, en muchos países se están reintroduciendo Cigüeñas blancas debido al descenso de sus poblaciones en dichas áreas. En otros países, se están realizando actividades para su conservación. Todo ello, nos indica la importancia de esta especie en nuestros ecosistemas y la preocupación del ser humano hacia ellas.

Son controladoras de plagas de diferentes insectos, reptiles, pequeños mamíferos, anfibios, etc… Por ello, son tan importantes para nuestro entorno natural y que este, mantenga el equilibrio.

La legislación ambiental prohíbe la retirada de nidos, la destrucción de los mismos o cualquier molestia o afección que repercuta negativamente en la fase reproductora de las aves, por lo que algunas prácticas habituales como la rotura o retirada de nidos de cigüeñas es una infracción administrativa.

Para estos casos se cuenta con medidas alternativas, y, en cualquier caso, si se demostrara tras un preceptivo informe técnico que se están produciendo daños al patrimonio monumental o existe riesgo real para las personas, el órgano ambiental competente de la comunidad autónoma correspondiente podría emitir una autorización para realizar los trabajos necesarios, siempre en la época más adecuada (cuando no afecte a la reproducción de las especies protegidas). También podría autorizar la posible retirada de nidos si no existiese otra solución satisfactoria, pero siempre con permiso.

REPRODUCCIÓN

Pareja de Cigüeña blanca (Ciconia ciconia) en su nido.